Ver el programa de la televisión cubana Razones de Cuba me provocó vergüenza ajena. Cómo un gobierno expone por razones de un país una guerra cibernética que no existe va más allá de todo entendimiento.
Con tal teoría conspirativa abofan a los televidentes cubanos con un mensaje mesiánico de pueblo elegido bajo constantes amenazas internacionales. Da grima cuando la realidad es que, salvo los cubanos, nadie más está interesado en que Fidel y Raúl Castro se caigan de culo por un resbalón de cáscara de plátano o del poder. Cuba ya no es ni papa caliente, más bien todo lo contrario, un tubérculo podrido a la espera de la desintegración vegetal para luego ver cómo se desarrollan los hechos, porque hasta los analistas políticos se han dado por vencidos en sus cálculos.
Para quienes vivimos en sociedades democráticas, con acceso a la información desde la cama, en un tren o paseando al perro, la idea de la CIA pagando a cientos, miles de cubanos para que escriban contra el gobierno de los hermanos Castro es tan descabellada que ya ni provoca deseos de ripostar; más bien nos reímos con aquello de “yo también soy de la CIA”.
Lo penoso es que aquellos cubanos con poco contacto con personas viviendo fuera de la Isla se creen todavía el cuento de que forman parte del ombligo del mundo. Pobrecillos.
Habría que hacer un documental sobre la vida de los bloggers. Cómo es el día de una Aguaya allá en Berlín, con dos hijos pequeños, esposo, trabajo y hogar. O de un Enrisco padre, esposo y profesor universitario; o un Garrincha con horas de desempleo; o un Alfredo Pong, entre planos y deberes hogareños; o de un Cacique Guamá, padre y con los mismos deseos de divertirse de un joven treintañero, para poner unos pocos ejemplos, porque la cantidad de voces da para un largometraje. Hecho el documental, pasarlo en memorias flash por toda Cuba.
Hubiera querido escribir sobre el tema varios días atrás. Pero como no puedo arrodillarme y pedir con vehemencia “Ay, Santa CIA, envíame un cheque con el presupuesto de mi casa”, porque a la Santa CIA le importa tres pepinos que yo actualice o no mi blog, y mucho menos pagarme.
Cuando se trata de denunciar una dictadura de medio siglo por cuenta de la cual no vivimos en nuestro país, lo hacemos gratis y con la misma pasión del cocotazo del desquite El acto más espontáneo que quizás nos queda a los cubanos errantes.
Con tal teoría conspirativa abofan a los televidentes cubanos con un mensaje mesiánico de pueblo elegido bajo constantes amenazas internacionales. Da grima cuando la realidad es que, salvo los cubanos, nadie más está interesado en que Fidel y Raúl Castro se caigan de culo por un resbalón de cáscara de plátano o del poder. Cuba ya no es ni papa caliente, más bien todo lo contrario, un tubérculo podrido a la espera de la desintegración vegetal para luego ver cómo se desarrollan los hechos, porque hasta los analistas políticos se han dado por vencidos en sus cálculos.
Para quienes vivimos en sociedades democráticas, con acceso a la información desde la cama, en un tren o paseando al perro, la idea de la CIA pagando a cientos, miles de cubanos para que escriban contra el gobierno de los hermanos Castro es tan descabellada que ya ni provoca deseos de ripostar; más bien nos reímos con aquello de “yo también soy de la CIA”.
Lo penoso es que aquellos cubanos con poco contacto con personas viviendo fuera de la Isla se creen todavía el cuento de que forman parte del ombligo del mundo. Pobrecillos.
Habría que hacer un documental sobre la vida de los bloggers. Cómo es el día de una Aguaya allá en Berlín, con dos hijos pequeños, esposo, trabajo y hogar. O de un Enrisco padre, esposo y profesor universitario; o un Garrincha con horas de desempleo; o un Alfredo Pong, entre planos y deberes hogareños; o de un Cacique Guamá, padre y con los mismos deseos de divertirse de un joven treintañero, para poner unos pocos ejemplos, porque la cantidad de voces da para un largometraje. Hecho el documental, pasarlo en memorias flash por toda Cuba.
Hubiera querido escribir sobre el tema varios días atrás. Pero como no puedo arrodillarme y pedir con vehemencia “Ay, Santa CIA, envíame un cheque con el presupuesto de mi casa”, porque a la Santa CIA le importa tres pepinos que yo actualice o no mi blog, y mucho menos pagarme.
Cuando se trata de denunciar una dictadura de medio siglo por cuenta de la cual no vivimos en nuestro país, lo hacemos gratis y con la misma pasión del cocotazo del desquite El acto más espontáneo que quizás nos queda a los cubanos errantes.
16 comments:
¡¡¡Fe no me nal!!!
Es que no se dan cuenta esos HP que si la Cia nos pagara, ellos YA no estubieran ahí.
LOL!
Asi mismo estimado Rolando!
Breve e impactante post. Mis felicitaciones más sinceras. Bien escrito, agudo y sencillo. El día en que yo mismo, por mi cuenta, decida romper el hielo y filmar ese documental, te escribiré agradeciéndote la idea original.
Un abrazo.
Y hasta a mí también me pagan… LOL
que bueno que resucito Don Eufrate,
el post esta como nos acostumbro!
¡Va a ser tremendo palo!
Si haces un grupo en facebook, a la gente les sería fácil ponerse de acuerdo (estructura y sequencia, formato, resolución,ratio, peso del archivo, duración de los clips, etc.), y a cuál sitio subir los vídeos de cada cual; y encontrar alguien que arme el muñeco (lo edite).
Usted lo ha dicho todo, se creen que Cuba es el ombligo del mundo y tienen convencidos a 11 millones de infelices de que es asi.
pues yo deberia ser un asalariado .....donde esta mi billete???!!!!
ah!! estuvo genialmente escrito....simple y contundente!!
Al duro y sin careta!! Muy bueno, Eu.
Bárbaro Eufrates! Sólo pocas horas sin entrar a tu blog y tremenda sorpresa que me llevo con este artículo tan bueno!
Eu, cuánto tiempo que no te dejaba comments!
Me alegra hacerlo en tan acertado post. De verdad da risa todo ese cuento de la CIA que, desgraciadamente, todavía hay quien se cree en Cuba. O serán tan aburridamente ignorantes quienes propagan tales novelitas?
Tu idea la encuentro genial. Yo no tuviera reparo alguno en contar por qué hago lo que hago sin un centavo de por medio...
Abrazo cubano-berlinés!
Dan mucha pena!!!
Con el mismo bocadillo hace un siglo.Que cambien el repertorio que esta muy gastado y estupido.
Muy buen post Don Eufrates.
Gracias amigos!
Por comentarios dejados aqui y en PD, me doy cuenta que el documental bien puede ser realizable. La idea de PolO es muy buena.
Yo no tengo experiencia con videos, pero un cineasta que dirija y edite lo que los bloggers les manden, solo llevaria de gasto el tiempo invertido.
Saludos a todos!
éufrates del alma, yo participaría en el video, pero la compañía de relaciones públicas que me ha conseguido la c.i.a y el grupo "prisa" tienen que autorizar mis actividades en conjunto con mi bufé de abogados asalariados de la n.s.a y el f.b.i, y luego confirmar con mis banqueros suizos, vigilia mambisa, la f.n.c.a, wall street y charlie sheen.
pero te saludo y te aplaudo gratis, vaya.
(en lo que te pueda ayudar, grita)
Coincido contigo en todo. No obstante algunas voces o berridos desde París dicen que los blogueros cubanos (los que están en la isla) son bananeros y los que realmente son buenos se concentran en el exterior. A mi nadie me paga, lo que digo es porque estoy harto de ver como se destruye mi país. No tengo aspiraciones de ser funcionario de ningún gobierno, ni me importa quiénes ganan premios o no. Sí considero que es real la valentía de Fariñas, la de Las Damas de Blanco, los que no aceptaron el destierro, Yoani y muchos que no le hacen la corte al gobierno. Si los agentes incubiertos parisinos tienen otra información sería bueno conocerlas. La división entre los cubanos nos hace más daño. Las aspiraciones de ser el centro del mundo, el sol del universo disidente también hace daño. A ese agente también le hace falta un poco de maní. Saludos Eu
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