Sunday, January 31, 2010

LAS DAMAS DE BLANCO, OTRO DOMINGO…


A esas mujeres valientes que recorren la Quinta Avenida de la Habana todos los domingos vestidas de blanco, en silencio, portando un gladiolo, desafiando a la dictadura mientras le piden al mundo que se solidarice con la liberación de sus esposos, padres, hijos, hermanos, amigos, presos por el solo delito de querer pacíficamente libertad de expresión, elecciones libres y una vida digna para el pueblo cubano. Para estas mujeres, con toda admiración, dedico un gladiolo cada domingo.


Blogs amigos que portan esta ilustración en solidaridad con las Damas de Blanco.


Saturday, January 30, 2010

“A CHANGO” CON COMPAY Y KHALED, DICE PLUTARCO…


Querido Éufrates:

Un lector de El Imparcial Digital me dijo que le gustaban los temas musicales que en ocasiones te he enviado a mi manera de tirar un cable a tierra cuando el corazón no aguanta mucho más.

Hoy comparto una maravilla de canción que está muy unida a nuestro folclore y que trasciende por la versión en castellano, yoruba y árabe en que está cantada por sus intérpretes: Compay Segundo (autor) y Khaled (Cheb Khaled, cantante de Raï , de origen franco-argelino, nacido en la ciudad portuaria de Sidi-El-Houri, Orán, Argelia, el 29 de febrero de 1960, y musulmán practicante). Esta versión me ha encantado porque trasgrede cánones religiosos muy difíciles de conciliar en estos tiempos, mientras logra una empatía musical fuera de serie.



La letra de Compay tiene todos los condimentos yoruba para homenajear a Changó y Khaled melódicamente apoya la versión con el timbre y color de su voz, acompasados por el ritmo de la música árabe y el toque de los tambores cubanos.

Esta canción está incluida en el disco Duetos de Compay Segundo y es una obra de arte de esa colección. Los invito a disfrutarla.

Saludo a Changó (letra)

Se prepara la eyibona
Pa´dar comienzo a la obra
Su iyabo tá furulele
En prenda de cabiosile
Obdara se pone el día
Pa´saludar a papá
Un gallo coco y maíz
Que tambó ya tá soná

A la coco comí eyé
A la coco comí eyé

Obaicheré, Obaicheré
Changó irolo obaicheré
Changó irolo obaicheré

Obachule, obachule obaé
Obaé obayama yana

Un abrazo, tu amigo Plutarco



Friday, January 29, 2010

MARIPOSAS ONAS…

Tomado del blog CubaHumor de Alfredo Pong.

Mariposas Onas: Dícese de aquellas mariposas que al llegar a la adultez sufren una metamorfosis y regresan a su estado original de gusanos, de la especie Anos. Se dividen en sub-especies como mariposas hijaeputonas, descaradonas, bodrionas, hipocritonas, retontonas, castrotonas, mentirosonas, impostoronas, mediocrinonas, chivatonas, prebendonas y hueleculonas. En esta semana se han reportado aproximadamente 450 Mariposas Onas en la Habana, Cuba.

Tomado de la editorial aldeana Guamá.

Thursday, January 28, 2010

LA MELCHORA NO TIENE QUIEN LA LEA

Foto: GETTY IMAGES. Tomada de CNN online.

A la Melchora de la Habana el destino le ha jugada una mala pasada: sobrevivir su propia muerte. Desde su escondite grita cuando se la meten y llora cuando se la sacan, como versa el refrán. Se deja ver públicamente por extranjeros, luego de un proceso de utilería que la vuelve presentable, y se le enredan sus bubónicas neuronas con la lengua, la mano y los tubos de los medicamentos que la mantienen todavía en un mundo donde ya pocos la recuerdan.

Salvo algunos tontos útiles que aún quedan, y sus gorilas amaestrados de Latinoamérica, ya nadie le hace caso. Pero la Melchora se empeña en llamar la atención desde el olvido, y grita y llora, y lo peor, escribe...

En uno de sus últimos lloriqueos se quejaba de la militarización de Haití por parte de los Estados Unidos, de la misma forma que se hubiese desgalillado si el vecino del norte hubiese decidido no enviar ayuda alguna.

No había pasado 24 horas del catastrófico terremoto de Haití, para poner un ejemplo, y el Dr. Sanjay Gupta, Jefe de los Corresponsales Médicos de CNN y neurocirujano, ya estaba en Port-au-Prince reportando para el mundo y salvando vidas, como sucedió con una bebé de 15 días de nacida que quedó huérfana en el terremoto; y quedó solo cuando un equipo de médicos belgas abandonó el lugar que fungía de hospital por razones de seguridad. Días más tarde, el Dr. Gupta realizó una operación de cerebro a una niña de 12 años a bordo del buque USS Carl Vinson, nave redirigida por EE.UU. hacia Haití el 13 de enero, que ha brindado ayuda médica y suministro de agua a parte de los damnificados de la tragedia. Las imágenes del Dr. Gupta no pasan inadvertidas: lo hemos visto lo mismo atendiendo a los heridos en las tiendas que improvisadamente funcionan como especie de enfermerías, que con una carretilla en medio del puerto buscando antibióticos y medicinas para los enfermos, además de reportando.

El pasado viernes, para poner otro ejemplo, a través de un maratón televisivo realizado por CNN, celebridades de Hollywood atendieron los teléfonos y en dos horas se recaudaron 58 millones de dólares, donde no se incluyen las donaciones efectuadas por corporaciones o donaciones privadas a gran escala. Esos 58 millones de dólares recogidos en dos horas salieron de la generosidad ciudadana de los Estados Unidos, en medio de una economía nacional depauperada.

Gracias a esa militarización que tanto le preocupa a la Melchora de la Habana, el aeropuerto y el puerto de Port-au-Prince han podido funcionar para recibir la ayuda humanitaria, pues los sucesivos gobernantes haitianos nunca habían creado una infraestructura estatal para proteger a su población, mucho menos en caso de desastre.

Para citar otro ejemplo de lo “malito” que son los malos de la película de la Melchora, el ejército norteamericano ha repartido de 50,000 a 80,000 radios portátiles, que se cargan por energía solar, a los haitianos desplazados que han hecho del Campo de Golf de Petionville su refugio. A través de la radio es que los sobrevivientes están encontrando noticias de sus seres queridos. Sin ir muy lejos, el martes, después de dos semanas de la tragedia, los soldados americanos sacaron de los escombros a un haitiano con el fémur partido y deshidratado, pero con vida, y lo atendieron inmediatamente. Lo menciono, porque es el último sobreviviente que se conoce hasta el momento en que finalizo este post. ¿Cuántas escenas como esta no hemos visto desde el terremoto?

La cercanía geográfica ha hecho posible la rápida ayuda de los Estados Unidos a la población haitiana. Pero no sólo eso, sino también el fondo federal -costeado con parte de nuestros impuestos- que este país mantiene para ayuda humanitaria internacional, sea demócrata o republicano su presidente de turno.

El hijo predilecto de la Melchora de la Habana, allá en Caracas, no se ha quedado atrás y se ha hecho eco públicamente de una de las teorías conspirativas del momento, que ya los rusos desmintieron. Otra de las teorías, que debe tener a la Melchora saboreando, es la de que E.E.U.U. lanzó una súper arma secreta a Cuba, pero falló el tiro y le dio a Haití, provocando el terremoto. Esta en especial me da risa, porque cómo es posible que con tanta sofisticación, los americanos no se hubieran preocupado por un detalle tan sencillo como el de calibrar la puntería, sobre todo, cuando el blanco potencial le queda tan cerca de casa.

A la mayoría de los lectores cubanos no tengo que explicarle que la Melchora es esa que “cuando se la meten gritan y cuando se la sacan lloran”, disculpándome ustedes hoy por la obscenidad. Los lectores no cubanos, supongo, quizás imaginan a quién me refiero… sí, a ese mismo, el viejo decrépito conocido por Fidel Castro.

Wednesday, January 27, 2010

ARQ. CHEO MALANGA: LA TORRE DE PISA


“Torre de Pisa”

Por: Arquitecto Cheo Malanga
Fotos: Arquitecto D.M.


La torre de Pisa es una de las torres más conocidas y visitadas mundialmente. Se encuentra ubicada en la ciudad de Pisa, un municipio de la región italiana de la Toscana.


La torre de Pisa constituye el campanario de la catedral de Santa María de Asunta, una de las obras más representativas del románico y forma parte de un conjunto de edificaciones junto a la catedral, como el Baptisterio, el Duomo y el Campo Santo.

Catedral Bapisterio.

Catedral de Santa María de Asunta.

El Camposanto.

Su construcción comenzó en 1173 a cargo del arquitecto Bonanno Pisano y abarcó tres etapas durante un periodo de 200 años.

La primera etapa fue la construcción de la primera planta, conformada por pilares con capiteles clásicos y arcos ciegos. Al alcanzar la cuarta planta, en 1178, un fallo en los cimientos hizo que la torre comenzara a inclinarse hacia el norte. La construcción se detuvo por un siglo debido a guerras entre los písanos.


La segunda etapa comenzó en 1272, añadiéndose entonces otros tres nuevos niveles, hasta que en 1278 se detuvo nuevamente la construcción debido a la derrota de Pisa por parte de los genoveses.

La tercera etapa de construcción comenzó en 1360, construyéndose durante muchos años la última planta, el campanario. Al colocar las siete campanas, correspondientes a cada nota musical, la torre comenzó a inclinarse nuevamente, pero esta vez hacia el sur.


La torre posee una altura de 55.8 metros, ocho niveles y un total de 180 columnas. La base posee 15 columnas con arcos ciegos, luego 6 niveles con una columnata externa y es rematada por el campanario. El diámetro de la base es de 15.5 metros. La escalera interna en espiral que conduce hasta el último nivel posee 294 escalones.

En la ciudad de Pisa existen otras tres torres inclinadas, pero sin dudas la más célebre es la de la catedral de Santa María de Asunta. La razón de que tal cantidad de edificaciones se encuentren inclinadas se debe a la naturaleza pantanosa del terreno sobre el que está situado la ciudad, que en muchos casos cede y se asienta con el peso de las edificaciones.


El Camposanto durante su reparación.

Después de una década de trabajos de consolidación se ha logrado reducir la inclinación de la torre a casi 4.00 metros, lo que permitirá disfrutar de esta singular obra por otros 300 años.


El miércoles próximo publicaré fotos del interior de la Torre de Pisa y de su Catedral, así como vistas aéreas del conjunto, las cuales fueron tomadas -conjuntamente con las que ilustran este post- por mi colega, el arquitecto D.M.





Tuesday, January 26, 2010

CARL SHURZ PARK Y GRACIE MANSION EN DOS ESTACIONES














Fotos: Eufrates del Valle.

El Parque Carl Shurz y su famosa casa de los Alcaldes de New York, Gracie Mansion, en dos estaciones: primavera (2008) e invierno (2009). Un oasis del mundanal ruido y de los turistas, uno de los secretos mejores guardados de la Ciudad de New York.

Monday, January 25, 2010

LA CULPA ES DE FIDEL


La semana pasada, mientras revisaba las películas que ofrecía el canal Sundance, tropecé con Blame It On Fidel. Aunque estaba a punto de dormirme, con ese título creo que no hay cubano que se le resista si se lo ponen delante de sus narices. Y lo que es mejor, el filme me mantuvo despierto hasta sus créditos finales. Sí, ya sé que “estoy atrás del palo”, porque La Faute à Fidel -su título original pues la cinta es francesa- fue realizada en el 2006. Pero, bueno, yo la vi la semana pasada, y si el despiste no puedo cargárselo a quien-ustedes-saben, muchas de mis “musarañas en la azotea” bien que podría, por la misma razón que el personaje central de la película.


Anna, la protagonista, es una niña francesa de 9 años, hija de un abogado y una freelancer que escribe para la revista Marie Claire, en un hogar parisino de clase media alta. Su historia transcurre entre 1970 y 1973. En ese período su padre deja su trabajo para convertirse en enlace entre los chilenos de la Unidad Popular que llevan a Salvador Allende al poder en Chile, y Francia. A partir de ahí, Anna comienza a interpretar el mundo según sus circunstancias y lo que le escucha decir a las personas que la rodean.

Julie Depardieu, en su rol de la madre de Anna, y Stefano Accorsi, en el del padre.

Su primera lección política la recibe de Filomena, su niñera, una exiliada cubana en París, quien le explica que la culpa de todo es de los barbudos rojos. Cuando la estabilidad familiar comienza a desmoronarse, sus nuevas niñeras resultan mano de obra más barata que la anterior, su amplia y confortable casa se reduce a un apartamentico, y los barbudos chilenos ocupan toda la atención de sus padres -entre otros subtemas- Anna saca sus propias conclusiones.


Mi risa en medio de la madrugada debe haber despertado a varios vecinos. Es que, de pronto, me vi retratado en Anna, pero en un marco histórico con varios años de antelación.

Por ejemplo, la virginidad de mi inocencia política creo que la perdí en noviembre de 1963; yo tenía 6 años y cursaba mi primer grado, cuando en Dallas, Texas, asesinaron al presidente norteamericano John F. Kennedy. Mi madre, que era en la época una entusiasta de Kennedy por su dedicación a la igualdad racial en los Estados Unidos, tenía una gran foto suya en blanco y negro, y hasta ese momento, Kennedy era lo más cercano a lo que yo quería ser cuando fuera grande. Aquella ilusión duró hasta 2 ó 3 días después de su asesinato, cuando en la escuela primaria nos pusieron a cantar:

“Míster Kennedy se murió / y lo fueron a enterrar / y el sepulturero dijo / yo no entierro a ese animal…”

La foto de Kennedy desapareció de mi hogar, tal como el cuadro del Sagrado Corazón de Jesús que presidía la sala de la casa de mis abuelos fue a parar al último dormitorio, y yo pasé el resto de mi infancia visualizando a John F. Kennedy tal como lo veía en la foto en blanco y negro de mi madre, pero con un par de orejonas de burro que mi imaginación le agregó arbitrariamente después de cantar aquella dichosa cancioncita.


Anna, la protagonista de La culpa es de Fidel, me recuerda a mí mismo y a mis confusiones, como aquella vez que le mostré orgullosamente a mi abuelo materno mi primera pañoleta de pionero, y mi abuelo, como si yo no existiera, se viró hacia mi abuela y le dijo: “Si fuera mi hijo le arrancaba ese trapo del cuello ahora mismo”.

La frase de “… la revolución se hizo para que todos fuéramos iguales… “, que constantemente se oía en la televisión a principio de los sesenta, debo confesar que me llenó de entusiasmo después que el célebre Manuel Piñeiro, también conocido por Barba Roja y amigo de mis padres desde sus años mozos, le celebrara en la playa de Santa María el cumpleaños a su hijo Manolito y enviara “su” Impala a nuestra casa para llevarnos a dicha fiesta. Fue el primer carro que vi con un teléfono (o lo más parecido a tal aparato que podía tener un carro en aquella época), y yo esperaba con ansias el día en que la revolución nos igualara poniéndole teléfonos a los carros de mis padres.

Aunque por motivos distintos, como Anna también perdí mi paraíso cuando nos mudamos a una casa algo más pequeña, después que dos de los empleados domésticos, el mulato Conrado y el chino Wilfredo, le dijeran a mi madre -ya divorciada- que la dejaban pues iban “a incorporarse a la revolución”, y ella sola no podía manejar aquella inmensa propiedad con varios niños incluidos. Tiempo después mi abuelo comentó, jocosamente, que de tanto que se habían incorporado, los dos “…mal agradecidos, que siempre fueron tratados como familia…”, pararon en un campo de concentración porque a ambos “les había picado un cangrejo”, frase que mi abuelo usaba para referirse a los hombres afeminados. Por buen rato imaginé a Conrado y a Wilfredo con un cangrejo colgado en el culo cada uno.

François, el hermanito de Anna, interpretado por Benjamin Feuillet.

Anna tuvo en su hermanito François como una especie de Pepe Grillo. Yo tuve el mío en mi hermana mayor. En una escena en que Anna le reafirma a François que la culpa es de los barbudos rojos, el niño le dice que Santa Claus es rojo y tiene barba. El fragmento me recordó el día que le dije a mi hermana que cuando fuera grande me iría a luchar a la Sierra Maestra, y ella me contestó: “¡Qué Sierra Maestra, chico…! Si no bajas al patio por un simple panal de abejas…”

A mis 9 años, la edad del personaje protagónico de La culpa es de Fidel, el instinto de supervivencia emocional me orientaba. Había quedado totalmente a su merced a la hora de emitir un comentario, y cuál versión podía dar en la escuela, en el parque con mis amigos o en mi casa. Esa antena que cada niño cubano ha tenido que activar inconscientemente para interrelacionarse en la sociedad guió el resto de mi vida en Cuba, al punto que hasta en una época llegué a creérmelo. Anna pudo darse el lujo de cuestionarse todo en voz alta, porque ella -en su contexto- era la distinta en una sociedad que continuaba funcionando sanamente. Mis submundos ya eran parte de la gangrena.


La película me encantó y se la recomiendo a todo aquel que todavía esté “atrás del palo” como estuve yo hasta la semana pasada. La historia, basada en la novela Tutta Colpa di Fidel, de Domitilla Calamai, seguramente le sacará “los guayabitos escondidos”, como le sucedió a este otro cubano. El filme fue el primer largometraje de ficción de Julie Gavras, hija de Costa Gavras -¿recuerdan Z y Missing?- quien supongo se vio retratada en Anna, personaje magníficamente interpretado por Nina Kervel.


Al final, las devastadoras consecuencias internacionales provocadas por ese laboratorio experimental que ha sido Cuba desde 1959, han hecho que medio siglo después todos los afectados -de decenas de nacionalidades diferentes- señalemos con el dedo hacia el mismo lugar. Es que, aunque parezca tan absurdo como morirse de frío en Cuba, el primer eslabón de la culpa es Fidel Castro. Colgados a ese eslabón, todos los que un día le creímos su retorcido cuento.

Sunday, January 24, 2010

LAS DAMAS DE BLANCO. “BERTA” por Yolanda Huerga.


A esas mujeres valientes que recorren la Quinta Avenida de la Habana todos los domingos vestidas de blanco, en silencio, portando un gladiolo, desafiando a la dictadura mientras le piden al mundo que se solidarice con la liberación de sus esposos, padres, hijos, hermanos, amigos, presos por el solo delito de querer pacíficamente libertad de expresión, elecciones libres y una vida digna para el pueblo cubano. Para estas mujeres, con toda admiración, dedico un gladiolo cada domingo.


“Berta”

Por Yolanda Huerga

Berta Soler es el azabache de las Damas de Blanco. Su energía, enorme y poderosa, las protege frente a las influencias negativas y maleficios. De ánimo alegre, ha sabido intervenir oportunamente cuando algún indicio de agotamiento o resquebrajamiento motivados por los años de tensión o sibilinos propósitos han azotado a las mujeres que componen el grupo.

Se siente orgullosa de ser negra, pero le avergüenza que compatriotas suyos pretendan humillarla por esto: frecuentemente en los actos de repudio las hordas entrenadas y dirigidas por la Seguridad del Estado tratan de minimizarla y agredirla por el color de su piel.


Nunca, antes de haberse incorporado a las Damas de Blanco, se había sentido discriminada, porque el pueblo cubano no es segregacionista, pero el régimen, intrínsecamente racista, manipula a sus acólitos y utiliza los recursos que cree más insultantes para atacar a los que se le oponen.


Cuando comenzamos a ir a misa en la iglesia de Santa Rita, a finales de marzo de 2003, ya ella asistía con el Comité de Madres Leonor Pérez. Su esposo había cumplido una condena anterior en el presidio político cubano.


Ángel Moya Acosta, fundador del movimiento Libertad y Democracia, fue nuevamente condenado a 20 años de prisión en la Primavera Negra de Cuba. Cuentan que cuando los guardias se lo llevaban esposado, se dirigió a sus llorosos hijos y les dijo bien alto: “No me apresan por delincuente sino por defender los derechos humanos de nuestro pueblo”.

Y su compañera de la vida y de las ideas no se queda detrás en valentía. Ella fue la protagonista del primer plante que hicieron las familiares de los presos políticos en la llamada Plaza de la Revolución en octubre de 2004: su marido estaba padeciendo de una hernia discal que apenas lo dejaba caminar, después de infructuosas gestiones para que lo trasladaran a La Habana para operarlo, decidió entregar una Carta en el Consejo de Estado y no moverse de allí hasta que le dieran una respuesta positiva. Acompañada por su cuñada, y por otras Damas, estuvo tres días con sus noches en el lugar. Al tercer día la sacaron por la fuerza a ella y a los que la acompañaban en ese momento, pero logró su demanda: Moya fue trasladado a un hospital civil y operado.


A su coraje une la chispa burlona de la gente del pueblo. En una ocasión fue arrestada y llevada a la estación de policía. Allí se encaró a los agentes del orden y les exigió explicación de su detención: el oficial a cargo le dijo “Aaah ja… ¿qué dice ahí?”, señalando a la manilla blanca que Berta traía en la muñeca. Ella, abriendo los ojos, leyó la inscripción de su pulsera y le contestó “dice cambio ¿y qué?” y entonces el oficial continuó “ja, cambio, eso significa el cambio a otro sistema, tumbar a Fidel, ¿no?”. A lo que Berta socarronamente respondió “bueno… ahí no dice nada de eso, quien lo ha dicho es usted”.


Como mucha gente llega a su casa buscando una medicina, alguna vitamina o quizás un jabón y Berta, con cariño, ayuda al necesitado, es muy popular y admirada en su barrio de Alamar. Esto es motivo de preocupación para la jefatura del país que tiene entre sus prioridades mantener aislada y desacreditada a la oposición pacífica.

A principios de este año aparecieron letreros cerca de su hogar, en las paredes del edificio donde vive, en la bodega donde hace sus compras y en varios sitios más que decían “¡Berta es del G-2!” Los vecinos los borraron sin decirle nada, para evitarle más lastimaduras de las que ya soporta, pero un día en su camino a la casa se dio de cara con uno de los injuriosos carteles y luego supo que había habido más.

Qué pobre y tambaleante está ese gobierno que ha llegado a las más bajas maniobras contra indefensas mujeres que lo único que poseen para defenderse es su razón y sus gladiolos.


Blogs amigos que portan esta ilustración en solidaridad con las Damas de Blanco.