Figura slender, andrógina. Un cuerpo alto, alto, como un pino, y debe pesar menos que un comino. Piel que brilla de salud y frescura. Gestos únicos, algo de felino. Hablar pausado. Dicción correcta. Silencio misterioso. Look moderno-clásico. Miradas que disimulan un más allá pero se quedan. Al fin me habla.
Do you get lighter?
Corazón encadenado que se despotrica. Fosforera con banderín de los Yankees que pasa de mano en mano.
Dos días más tarde fosforera roja que viene y va. Y luego amarilla. Y azul. Y blanca. Y otra roja.
Y de nuevo azul.
Where are you from?
Respondo.
I though you are Russian for your heavy accent.
Sonrio y no le menciono el cansancio que da oír siempre lo mismo.
Me cuenta que nació y se crió en New York. Que vive en el East Village.
Y fosforera negra con publicidad. Y transparente.
Que su trabajo le aburre. Que volvió al College.
Fosforera verde. Y Blanca.
Que le gusta el vino tinto. Que dejó el College.
Negra. Y de rallas.
Que su papá acaba de morir de cáncer de los pulmones. Le consuelo.
Fosforera amarilla.
Que quiere dejar de fumar.
Y roja.
Encuentro en el subway. Sorpresa. Risas.
Púrpura. Le celebro un anillo.
A birthday’s gift...
Me abre el camino. Le pregunto la edad.
Thrity.
El corazón se me sale como un muelle alborotado por los botones de la camisa.
And you?
Pregunta. Le digo.
You look great.
Me consuela.
Y el corazón se le sale por las almendras que son sus ojos. Del susto.
Carlos Gardel se merece un yiti o un coockie-punch*.
(Cookie-punch: Traduccion espontánea que hizo el hijo de 10 años de un amigo a la galleta cubana... no a la de Soda ni a la de María, sino a la que va directo al rostro de una persona que nos saca de quicio)
Y ahora, despreocupadamente porque se que nunca va a leer esto, canto...
YOUR BEAUTIFUL – James Blunt
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